Cartagena del Chaira!

Este nombre se da debido a la siguiente narración:

La leyenda nace en una tribu que hábito las riberas del rio Caguán, afluente del yapura hoy rio Caquetá. En un lugar distante en los empinados senos de la macarena “Ariarí” hermano menor de Chairá, viajo a escoger el lugar de reinado y dominio de su hermano, en ese lugar vio una mañana, con sorpresa, que de la superficie liquida del lago emergía un cuerpo de mujer que iba retocando las ramas de los arboles con delicadas y otras parásitas florecidas, aromatizando misteriosamente la laguna.

Cuando el Chairá sabe de esta aparición se establece a la orilla del rio, levanta su trono en homenaje a la silueta de esta hermosa mujer que surge lentamente de las aguas en las mañanas de mayo,  de esta forma es como se le da el nombre de la Diosa del Chaira.

Este es una hermosa leyenda, creo que aun somos privilegiados por tener este tipo de mitos en nuestra región y por conservar algunas tradiciones, Cartagena del chaira es un caserío, sus casas están hechas en tabla, sus patios son de tierra y con muchos árboles de pomas.

Caquetá, tierra de olores, colores y muchos ríos!

Enero, mes caluroso y propicio para iniciar un pequeño viaje a una hermosa tierra llena de misterios, mitos, cuentos y hasta espantos, el Caquetá es un departamento de Colombia. Situado en la región del Amazonas. Su capital es la ciudad de Florencia. 

Se caracteriza por sus exuberantes paisajes, sus dulces frutas amazónicas, su hermosa gente, sus enormes ríos y una variedad exquisita de hermosa vegetación y animales, pero sobre todo por unos atardeceres hermosos!

Mi techo!

En la tarde nos encontramos varios cuates para coger limones amarillos, azar unos plátanos maduros, y comer bananos, plan de sábado cuando el día esta soleado, después de comer varias cosas nos sentamos  o nos acostamos en el patio de mi casa para hablar de todo y no decir nada o para ver lo que muchos ya no creen que existe. Como las grandes y preciosas formas de las nubes, un cielo muy azul y limpio de aviones, un árbol que mueve sus ramas al compás del viento y un grupo de amigos que se tiran sobre la hierba a tomarse la vida de otra manera, menos acelerada, mas examinada, después de esto, nos levantamos, vemos una pelicula o simplemente vamos por una cerveza.

Fuego, Fuego.

Me encontraba en la casa de S, una de esas tardes de sábado, después de clase, tipo 4 0 5 de la tarde acabábamos de ver una de esas películas que dejan cierta incertidumbre de si es buena o mala? mientras estábamos tendidos en la cama, comenzó a incendiarse el apartamento con una de esas llamas que se extienden poco a poco y se van consumiendo por las esquinas de la casa. mientras que por la ventana del otro cuarto se filtraba un fuerte color naranja, mezclado con amarillo, vestido de cierta complicidad por ser un poco más de las 6.

Quien dice que el paraiso queda lejos?

La Florida un lugar de cuentos, un lugar frio, un lugar silvestre, un lugar a solo 35 minutos de la ciudad de Pereira, un lugar para acampar, un lugar para escuchar del puma que nunca se ha visto, un lugar para fumar y tomar vino, un lugar para oler, un lugar para palpar, un lugar para que dejarse llevar, un lugar para escapar, un lugar donde aparecen caballos en la noche y te mueven la carpa, un lugar para dormir, o simplemente para no hacer nada!

La Cristalina

Este viaje, caminata, como prefieran pensarlo  fue muy especial para mí, bueno para todos los de la foto, para mí fue la primera vez que estuve en un Rio acá en Pereira, hace ya más de 8 años era 2001 y estábamos en el Colegio, cursábamos grado 10, éramos un grupo de amigos que jugábamos a los exploradores y a las promesas de caminatas y campamentos, la Cristalina es un lugar que se encuentra en Arabia, (Risaralda) en el trayecto hacia el rio algunos de estos caminantes caían, otros rodaban, se sentaban y no faltaba el que se quejaba, haciendo mala cara y diciendo: donde diablos queda eso!!! decía Mi saltacharcos, falta mucho? preguntaba El caballero, NO! a donde nos trajo Milena gritaba el Escarabajo, pero después de un rato, y de comer algunos dulces, unas cuantas papitas de limon, y un par de bocadillos, montaña abajo y después de caminar 30 minutos, Allí la encontramos! desnuda, limpia de prejuicios de color o de sexo, apacible, lista  para dejarnos entrar en ella, tranquila y llena de su inagotable frescura, ante nuestros ojos brillaba ella la única, la hermosa Cristalina. a la que después de ver solo podíamos admirar y contemplar ah, eso si después de todo eso obvio que nos metimos al agua todos, pues al fin de cuentas a eso habíamos ido.